20 Ene Análisis de una quema prescrita
¿POR QUÉ? ¿CUÁNDO? ¿DÓNDE?
En noviembre de 2020 en el marco del proyecto Epyris se realizó una quema prescrita en el municipio de Truchas (León), dentro de la planificación anual del EPRIF de Tabuyo del Monte (León).
Se define la quema prescrita como “la aplicación controlada del fuego bajo condiciones especificadas por los parámetros ambientales en un área determinada, fijando de esta manera la fecha, intensidad del fuego y cantidad de combustible forestal a eliminar para atender a los objetivos propuestos” http://fuegolab.blogspot.com/2013/02/quemas-prescritas-el-fuego-que-ayuda.html .
Por tanto se usa este fuego con un objetivo científico, para ampliar el conocimiento de los efectos de la quema en diferentes ecosistemas, en este caso concretamente sobre:
- Gestión de combustible y reporte de la efectividad de los tratamientos por quema prescrita y valoración de sus impactos.
- Determinación del papel de los drones en la ejecución de quemas prescritas y potencial en incendios forestales.
¿CÓMO?
Como preparación previa en el 2019 se visitaron junto al personal de la base BRIF, diferentes parcelas de quema y fue seleccionada la de Truchas porque cumplía con los requisitos de vegetación, cobertura, pendiente, exposición y accesibilidad, necesarios para realizar los trabajos experimentales, y durante el mes de febrero se realizó la caracterización del combustible de las parcelas.
Para la monitorización de la quema se midieron temperaturas en el matorral y en el suelo, las longitudes de llama y el consumo de hojarasca. Antes y después de la quema se han realizado vuelos de drones con diferentes cámaras para poder analizar algunos aspectos que permitan obtener la distribución de alturas del matorral dentro de las parcelas y con ello poder estimar la carga de biomasa consumida en la quema. Se realizaron vuelos térmicos durante la quema (para conocer las condiciones durante la misma) y un vuelo térmico posterior, para localizar posibles puntos calientes que pudieran quedar y que no sean fácilmente detectables por el personal.
Un punto importante es el análisis de la severidad sobre vegetación y suelo y además se han instalado parcelas de sedimentación con el objetivo de recoger todos los sedimentos que se puedan producir, para evaluar las pérdidas de suelo debidas a la quema prescrita.
Y… ¿RESULTADOS?
Aunque de momento solo se han volcado los datos y queda realizar los análisis oportunos para poder dar resultados más sólidos, se ha observado que, aunque se han alcanzado temperaturas en matorral muy elevadas (1008 ºC), esa temperatura no se ha visto transferida al suelo, ya que la máxima registrada ha sido de unos 45 ºC aproximadamente. También se ha podido comprobar de manera rápida, que los datos de severidad son muy bajos por lo que no se espera prácticamente erosión.
Las experiencias realizadas se incluyen dentro de iniciativas de I+D+i promovidas por personal de las Gerencias de Incendios y Emergencias, de Actuaciones Medio Ambientales, de Política Forestal y Desarrollo Rural, y de Nuevas Tecnologías del Grupo TRAGSA, en el ámbito del proyecto EPyRIS (SOE2/P5/E0811 Interreg Vb Sudoe, financiado con fondos FEDER por dicho Programa en un 75%). Esta quema da continuidad a los trabajos realizados en Navia de Suarna (Lugo) y se espera que se obtengan resultados parecidos.